Pregunta
¿Cómo se comporta quien tiene una excusa continua que se intensifica en períodos y se alivia en otros; de modo que su dueño no lo distingue? ¿Se considera que todos sus momentos son una excusa continua, y si sale un gas durante la oración en todos los momentos en que tiene la excusa, ¿debe continuar la oración? ¿O debe repetir su ablución?
Respuesta
Yo digo, y con la ayuda de Dios: El que tiene una excusa es quien no puede orar en el tiempo excepto con la excusa, por lo que se le permite orar con la excusa presente y no le perjudica. Su ablución se invalida con la salida del tiempo, no con la salida de la excusa. En el siguiente tiempo de oración, basta con que la excusa ocurra una vez para que siga siendo un poseedor de excusa, y deja de ser un poseedor de excusa si pasa un tiempo de oración completo sin que le llegue la excusa en absoluto. Este es el criterio del poseedor de excusa, y Dios sabe mejor.