Digo y con la ayuda de Dios: la mujer se retira en la mezquita de su casa; porque es el lugar de su oración, así se cumple su espera en él. Si no tiene un lugar específico en su casa para orar, no le está permitido retirarse en su casa. No debe salir de la casa en la que se ha retirado si es un retiro obligatorio para ella. Si se retira en la mezquita de la comunidad, está permitido aunque con desagrado. La mezquita de su barrio es mejor para ella que la mezquita mayor; porque el Profeta r cuando se le preguntó sobre la mejor oración de la mujer, dijo: «En el lugar más oscuro de su casa» en Sahih Ibn Khuzaymah 3: 96. Y sobre Aisha, que Allah esté complacido con ella, que dijo: «Se mencionó que el Mensajero de Allah r se retiraba en los últimos diez días del mes de Ramadán, así que le pedí permiso y me lo dio. Entonces Hafsa le pidió a Aisha que le pidiera permiso, y lo hizo. Cuando Zainab bint Jahsh vio las construcciones, ordenó que se construyera la suya, y fue construida. Y el Mensajero de Allah r cuando oraba, se dirigía a su construcción y vio las construcciones y dijo: ¿Qué es esto? Le dijeron que eran las construcciones de Aisha, Hafsa y Zainab. Dijo: La piedad quiere esto, no estoy en retiro. Así que regresó y cuando rompió el ayuno, se retiró diez días de Shawwal» en Sunan al-Nasa'i al-Kubra 2: 259, y Sahih Ibn Khuzaymah 3: 345. Si se les desaconsejaba el retiro en la mezquita, aunque ellas solían salir a la comunidad en ese tiempo, es más apropiado que se les prohíba en nuestra época. Ver: Al-Wiqayah p245, Al-Tabyin 1: 351, Al-Mabsut 3: 119, y Badā'i al-Sanā'i 2: 113, y Allah sabe mejor.